domingo, 11 de diciembre de 2011

octavo derribo


la primera noche que fui rico
no supe que lo era
sí es verdad que tuve 
una vaga certeza
y empecé a imaginarme
a mí mismo
regalando dinero
a todo el mundo
en todas partes
para poder seguir el plan 
compré una excavadora
para poder echar abajo
muros más grandes
y más firmes
y compré dinamita
y cigarrillos
y whisky del bueno
y pagué a mujeres
y cuando casi 
había olvidado
mi razón de ser
tuve una iluminación
vi fuego
en todas partes
vi hombres curiosos
extasiados
por el aroma de las llamas
y regresé a las manos
la mejor herramienta
acarician
estrangulan
son el instrumento 
más corrupto
la quimera 
más sucia
y dije
ganarás
el sudor
con el pan
de tu
frente
y nadie
me creyó